EL HIGADO JODIDO Y YO BRINDANDO

Tras el concierto de Sativa (que grupo más bueno y que bueno está el guitarrista y qué guitarra más cojonera)en la Fnac, me fui a la sección de discos con las ganas de gastar en algo que me llamase la atención… ya sabéis… descubrir que todavía hay razones para comprar un CD porque sí… allí me encontré con esta pequeña sorpresa que llevaba publicado dese finales del 2006 y YO que ya no escucho radio3… pues no me había enterao. Y desde entonces ando flipando y divirtiéndome de lo lindo con EL.
ORPHANS… el nuevo disco de TOM WAITS, del que ya os adelanté una de mis canciones favoritas que tiene en la anterior entrada. Lo mejor es que la cosa viene muy completita en un estuche bien cuidado con 3CDs en donde hace una revisión de viejos temas y versiones mezcladas con nuevos temas… y es que este tipo mejora con los años pese a lo desgastao que anda… sobre todo su voz… que parece que en cualquier momento se va a romper de tanto alcohol y cigarros consumidos. El primer CD, BRAWLERS electrónico y lleno d buen blues, BAWLERS lleno de baladas y canciones escritas en noches interminables de bajón y desamor y BASTARDS rarezas y el lado más makarra y experimental…. para masocas incondicionales.
De Tom Waits habría mucho que decir pero para eso está la wikipedia y otras yerbas…. lo interesante es saber por qué gusta este tío y por qué tiene una gran legión de seguidores… a veces inexplicable…

Conocí a Tom Wais borracho… llendo a vomitar todo lo que tenía bajo las estrellas de una noche de verano en compañía de la tía que más amé a lo largo de mi adolescencia, con un loro viejo y renqueante a falta de unas pilas que renqueaban y una cinta del colega…. mientras lo echaba todo me moría de ganas por besarla y decirla cuanto la quería… pero mi boca no era precisamente el mejor refugio para compartir momentos de amor y no pasó nada hasta unos años después, un 15 de Agosto en otra noche de verano que me llevaría a terminar sabiendo lo que realmente sentía por las tías…. y desde luego por los tíos…. pero esa es otra historia que ya contaré….
Sonaba «El piano ha estado bebiendo» y ella me hablaba de él como si de un gurú se tratara, lo adoraba, lo idolatraba… y supo contagiarme ese lado canalla, pendenciero e inexplicablemente adorable que el hombre con garganta profunda desprendía mientras destripaba historias de perdedores que se desvanecen en callejones tristes y oscuros de ciudades tristes y oscuras…. el sueño americano dado la vuelta y echado a los perros de la lluvia.
Joder… eso era una auténtica pose!!!!!!! con Allen Ginsberg y William Burroughs recién conocidos y leidos en aquel momento, solo me faltaba seguir su senda y ser la postal de algo que ella pudiese admirar… e incluso enamorarse… y yo lo exploté al máximo…. locuras de adolescencia que ahora me divierten mucho y me traen cierta nostalgia, pero que dejaron de alguna manera ese poso necesario que con los años sirve para no perder la estela de Waits y al menos seguir disfrutando de su universo, que se mantiene fresco con cada trabajo que ve la luz.
En fin… que hacía tiempo que tenía ganas de hablar de Waits y mira por donde su nuevo trabajo me ha terminado dando una buena oportunidad… no espero que os guste porque no es plato de todos…. me conformo con que al menos os echéis unas risas imaginándoos a un adolescente atolondrado y borracho echando los higadillos en buena compañía.