es tarde y esta puta gripe no me deja dormir…
bueno… la verdad es que llevo bastante tiempo con el sueño cambiado, imagino que esta situación de inactividad es en parte la culpable de que no le de importancia a las horas de sueño, horas que dedico en exceso a la contemplación de los ácaros que se acumulan en las esquinas de mi casa.. por no decir en mi cerebro. Afortunadamente siempre hay algo en los adentros que me rescata y me pone en órbita, además del mozo… siempre alerta, siempre preocupado… siempre mimándome o sacando el látigo sutil de su ironía… eso sí que no falla.
Sin duda una de mis grietas más candentes en estos momentos es ese complicado y enrevesado ejercicio que consiste en sacar mi lado más emocional… más pasional… como diría la hermana corleone… buscar esos momentos pa que me estallen los sentimientos. Llevo toda mi vida atada a un estrecho filo de contención que evite que me salgan por miedo a que me estallen en la cara quizás…. es como no querer ver la mierda de uno…
no digo con esto que haya llevado una vida gris y tormentosa… al contrario… creo que mi vida ha sido la del típico niño menor de tres hermanos con gran diferencia de edad que creció sin hacer ruido en un ambiente familiar normal y con el pasillo hecho por mis hermanos para que mis padres, cansados de los otros dos se olvidaran un poco de mí.
Lo que pasa es que de tanto mirar hacia fuera… las personas de mi entorno se acostumbraron a contar con mi presencia y con mi facilidad para la conversación y mi excesiva propensión a la complacencia ajena sin mirar o calcular los posibles efectos, positivos o negativos que me podrían provocar. Me acostumbre a mirar en los demás… me acostumbre a salvar a los demás… y me olvidé de mí. Puede que esto suene egoista… pero es que nunca lo he sido…
Naturalmente esto me ha reportado siempre una falsa seguridad inspirada en una manía obsesiva por el control de todo lo que se mueve a mi alrededor… o de todo lo que tengo que decir, expresar o sencillamente escribir… y digo falsa seguridad porque no estaba bien cimentada, lo cual ha provocado el desmoronamiento de los últimos meses. Si a esto le sumas el efecto de una traición… el golpe es doblemente mortal.
Escribir esto para mi no es tan sencillo… cada entrada es como un parto que afortunadamente se va haciendo más ligero a medida que voy escribiendo… me cuesta pero me empieza incluso a divertir, me gusta ver que poco a poco empiezo a aceptar esa parte emocional que he tenido aprisionada en lo más oscuro de mis entrañas… he ido acumulando tanto que la erida por el reventón va a ser dificil cerrar… pero la sensación de ligereza que voy ganando al soltar todo ese lastre, me va dando una serenidad suficiente para afrontar aquellos sentimientos hasta ahora encerrados por el egoismo del falso autocontrol al que me he sometido. Cuando uno muda la piel requiere de un tiempo… es como cuando uno anda buscando su lugar… que she sho… que diría mi lokito argentino… un beso pibe.
Así que si de vez en cuando notarán que ando soltando mierda por acá… como con la entrada de Alatriste… cuyos comentarios agradezco porque han sido de lo más variado y enriquecedor. Espero algún día conocer la «madrugá» en Sevilla y probar en mi propia piel ese sentimiento de emoción por algo que simboliza tan marcadamente la pasión de un pueblo.
Aunque mi crítica iba un poco más enfocada precisamente al sentimiento de abandono de esos soldados por parte de sus superiores… y cómo uno debe saber lavar y guardar su ropa y el resto de la mierda pal ke la tenga que asumir. Algo que he experimentado de prmera mano.
De momento me quedo con ese calentón por ir a Madrid en Diciembre que le está entrando a la gente… parece que la cosa prometeeeeee.
bueno… la verdad es que llevo bastante tiempo con el sueño cambiado, imagino que esta situación de inactividad es en parte la culpable de que no le de importancia a las horas de sueño, horas que dedico en exceso a la contemplación de los ácaros que se acumulan en las esquinas de mi casa.. por no decir en mi cerebro. Afortunadamente siempre hay algo en los adentros que me rescata y me pone en órbita, además del mozo… siempre alerta, siempre preocupado… siempre mimándome o sacando el látigo sutil de su ironía… eso sí que no falla.
Sin duda una de mis grietas más candentes en estos momentos es ese complicado y enrevesado ejercicio que consiste en sacar mi lado más emocional… más pasional… como diría la hermana corleone… buscar esos momentos pa que me estallen los sentimientos. Llevo toda mi vida atada a un estrecho filo de contención que evite que me salgan por miedo a que me estallen en la cara quizás…. es como no querer ver la mierda de uno…
no digo con esto que haya llevado una vida gris y tormentosa… al contrario… creo que mi vida ha sido la del típico niño menor de tres hermanos con gran diferencia de edad que creció sin hacer ruido en un ambiente familiar normal y con el pasillo hecho por mis hermanos para que mis padres, cansados de los otros dos se olvidaran un poco de mí.
Lo que pasa es que de tanto mirar hacia fuera… las personas de mi entorno se acostumbraron a contar con mi presencia y con mi facilidad para la conversación y mi excesiva propensión a la complacencia ajena sin mirar o calcular los posibles efectos, positivos o negativos que me podrían provocar. Me acostumbre a mirar en los demás… me acostumbre a salvar a los demás… y me olvidé de mí. Puede que esto suene egoista… pero es que nunca lo he sido…
Naturalmente esto me ha reportado siempre una falsa seguridad inspirada en una manía obsesiva por el control de todo lo que se mueve a mi alrededor… o de todo lo que tengo que decir, expresar o sencillamente escribir… y digo falsa seguridad porque no estaba bien cimentada, lo cual ha provocado el desmoronamiento de los últimos meses. Si a esto le sumas el efecto de una traición… el golpe es doblemente mortal.
Escribir esto para mi no es tan sencillo… cada entrada es como un parto que afortunadamente se va haciendo más ligero a medida que voy escribiendo… me cuesta pero me empieza incluso a divertir, me gusta ver que poco a poco empiezo a aceptar esa parte emocional que he tenido aprisionada en lo más oscuro de mis entrañas… he ido acumulando tanto que la erida por el reventón va a ser dificil cerrar… pero la sensación de ligereza que voy ganando al soltar todo ese lastre, me va dando una serenidad suficiente para afrontar aquellos sentimientos hasta ahora encerrados por el egoismo del falso autocontrol al que me he sometido. Cuando uno muda la piel requiere de un tiempo… es como cuando uno anda buscando su lugar… que she sho… que diría mi lokito argentino… un beso pibe.
Así que si de vez en cuando notarán que ando soltando mierda por acá… como con la entrada de Alatriste… cuyos comentarios agradezco porque han sido de lo más variado y enriquecedor. Espero algún día conocer la «madrugá» en Sevilla y probar en mi propia piel ese sentimiento de emoción por algo que simboliza tan marcadamente la pasión de un pueblo.
Aunque mi crítica iba un poco más enfocada precisamente al sentimiento de abandono de esos soldados por parte de sus superiores… y cómo uno debe saber lavar y guardar su ropa y el resto de la mierda pal ke la tenga que asumir. Algo que he experimentado de prmera mano.
De momento me quedo con ese calentón por ir a Madrid en Diciembre que le está entrando a la gente… parece que la cosa prometeeeeee.
PD: dejo una imagen del castillo de Castrojeriz (Burgos), como ya dije mi segunda casa y un lugar mágico al me gusta acudir cuando ando mirando pa mis adentros, un lugar que requiere protagonismo propio en otra entrada.
6 ideas sobre “MUDANDO LA PIEL”
Aysss mi nene!! Que momentos pa que te estallen los sentimientos!! Y yo mientras tanto, seguro que roncando placidamente en la cama… Bueno, ya sabes que sigo ahí, atento por si hay que recomponer algun trozo (ya sabes lo que me gustan los puzzles y lo bien que se me dan). Espero que este proceso de muda de piel te deje con una tersa y suave, y que todo por fin vaya por buen camino.
Un besaqzo que te dare cuando llegue a casa…
Pd: las noches de insomnio tambien las podrias dedicar a retirar los acaros de las esquinas en lugar de mirarlos!! Que vergüenza!! Que va a pensar la gente de nuestra casa!!!
Así que a Madrid, y en diciembre… ummm… yo también tengo ganas de ir con mi niño para que arda la noche 😉
Cuídate esa gripe, anda. Y cuando quieras conocer la Madrugá de Sevilla, aquí tienes un cicerone. Buscaríamos los mejores sitios. Creo que te iba a encantar (o, al menos, a sorprender).
Un besote
Carlitos
que miedo me da a mi tambien ser un poco egoista cuando hay que serlo por miedo de caer en pecado… besos
Cuida esa gripe!
Escribes realmente bien. ¿No te incomoda eso de desnudarte emocionamente en público? Como ha cambiado el mundo con esto de los blogs.
Me gusta la foto, qué color.
Que te recuperes
Un abrazo
-Sed
Eso, encima animale!!
Con lo que le cuesta al niño expresarse, y ahora que se va soltando…
que decirte? que te quiero? que mudas la piel, esa piel como la tuya, la que esta curtida en la verdad y en asumir la verdad propia, no muda, acoje, acoje a los hurfanos de sentimientos, a los que los sentimientos nos han estallado y tantas veces y muchas que estallaran, hoy es un dia que gracias a mi capacidad de zorra no he estallado, pero una cosa te voy a decir, estate quieto y no mudes te necesito con esa esquisita piel de osito para que me ayudes, me protejas y me abraces, que muden los limacos, tu no nunca! un beso