Somos lo que exploramos, lo que experimentamos y vivimos. Pero también lo que contamos.
Somos lo que exploramos, lo que experimentamos y vivimos. Pero también lo que contamos.

Aitor

Ya está.. mañana es el último día de campaña. Llevo tiempo deseando que por fin llegue este domingo. Para mucha gente solo han sido 15 días. Mara mi y muhcas de mis compañeras y compañeros de EQUO han sido meses de preparación, sabiendo que la carrera iba a ser en desventaja y muy desigual. 
El sobreesfuerzo emocional llegaría este verano; el día que Aitor es elegido candidato a Lehendakari. Uno nunca está preparado para este tipo de cosas… y eso que llevo sobre mis espaldas unas cuantas eleciones en mis 20 años de militancia política. Pero estas eran diferentes. Me tocaba estar al lado de la persona que iba a ser el centro de muchas cosas, miradas, opiniones… «el candidato». 
Mis reacciones a esta situación han pasado por todos los estados. Euforia, esperanza, miedos, pánicos, necesidad de controlar lo incontrolable, decisiones precipitadas… Al final solo era la necesidad de tener todo bajo control, sabiendo lo realmente complicado que es un proceso electoral en un partido pequeño. Tanto en la adversidad que supone respecto a la escasez de medios, como en lo complejo de las relaciones personales que se dan a lo largo de estas semanas. El ritmo se vuelve tan frenético y las decisiones a tomar tan complicadas, que en muchas ocasiones no nos damos cuenta que detrás de cada persona hay una voluntad con su universo propio proclive a ser dañado.
De una manera u otra he ido sorteando todo este tipo de situaciones a mi manera… y con una dispersión en lo profesional que espero reconducir a partir del lunes 22.
Pero, además del excelente e increible potencial humano que me he encontrado durante estos meses en EQUO, en estos momentos solo puedo pensar en una persona, y en todo lo que ha pasado y superado a lo largo de estos últimos meses. Aitor. 
Quién es Aitor?
Aitor es la persona con la que llevo viviendo casi 10 años. Una persona que no es extraño que en estos momentos esté a punto de entrar en el Parlamento Vasco. Es como si desde muy joven tuviese el camino ya trazado por su manera de ser y ver el mundo. Porque no era muy normal que un chaval de 14 años sintiera la necesidad de participar en «Gesto por la Paz» ante la dramática situación social y política que se vivía en Euskadi en aquellos años. Una preupación y una rebeldía que le ha llevado a participar en muchas otras iniciativas, siempre relacionadas con la necesidad de poner fin al sufrimiento de los más débiles. Quizás se deba a su formación cristina, la educación ejemplar de sus padres y ese carisma personal y espontáneo que le hace ser un lider natural; de esos que se siente en la obligación de serlo, más que nada por el compromiso que lleva dentro y siente que ha de dar el primer paso cuando lo ve necesario. Pero también porque las personas que le rodean saben que es alguien honesto y sincero, en el que se puede confiar.
Por eso, desde los 14 años Aitor no ha dejado de ser un activista, siempre en primera fila… siempre en la frontera. 
Y en esas, no era extraño que nos encontráramos un día, después de una manifestación contra la guerra de Irak en 2003. Yo iba con unos amigos y excompañeros de militancia política.. él delante de la mani, en el grupo que la organizaba (como no). Solo recuerdo que un amigo común nos presentó y las próximas 24 horas fueron las más intensas y excitantes de mi vida. Me estaba enamorando del hombre que más admiro y he querido en mi vida.
Y desde entonces hemos ido compartiendo muchas más manifestaciones (desgraciadamente) vida, amor, muchas aventuras, muchas risas, lágrimas… y como siempre participando en todo aquello que creemos necesario para mejorar este mundo. 
No puedo dejar de acordarme de la otra mitad de mi vida en la militancia política y personal. «Macu». Comadre, conciencia, y memoria viva de mil experiencias vividas tras una pancarta, un mitin, una reunión o simplemente conspirando en su cocina mientras gin tonic en mano cocinábamos la conspiración adecuada. Ella sigue estando a nuestro lado a su manera, y lo va a estar de la manera que ella quiera cuando lo vea necesario. Porque Macu es EQUO. Ha donde llegamos hace año y medio.
En EQUO hemos encontrado la hormade nuestro zapato. Es el espacio donde uno se siente que encaja. Porque fuimos votantes desencantados en busca de un proyecto nuevo. Un proyecto nuevo y fresco, que vibra con gentes que ansían nuevas formas de hacer  y ver las cosas. Cosas e ideas hehas desde, por y para las personas. 
Y ahora?
Ahora estamos ante uno de los momentos más importantes de nuestra vida. Porque si Aitor consigue su escaño, no tengo ninguna duda que nuestras vidas van a cambiar bastante. Más por el contexto que por nuestra manera de vivir. Pero lo afronto con tranquilidad. Incluso si el resultado no es el que esperamos. Porque si hemos superado tantas cosas juntos hasta ahora, no tengo ninguna duda de que todo lo que venga a partir de ahora lo sabremos también afrontar de la misma manera que lo hemos hecho siempre. 
Gracias a todas y todos por acompañarnos en este camino.
Este soy yo y este es Aitor. No escondemos nada. No necesitamos decir más. Somos lo que veis. Compromiso y pasión por lo que hacemos. Ahora solo depende de ti unirte a nosotros y cambiar el futuro. Te animas?


Un día con el candidato. Aitor Urresti from EQUO Berdeak on Vimeo.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

I accept that my given data and my IP address is sent to a server in the USA only for the purpose of spam prevention through the Akismet program.More information on Akismet and GDPR.

5 ideas sobre “Aitor”